El estanque de las jóvenes ovejas virtuales
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Hola a todos;
Esta semana
vengo a hablaros de un fenómeno al que he llamado el estanque de las jóvenes
ovejas virtuales. Este fenómeno, bajo mi punto de vista y experiencia personal,
se aprovecha de jóvenes pre—adolescentes, adolescentes y jóvenes adultos y usa
las redes sociales como altavoz principal.
Generalmente
se radicaliza al joven en cuestión sobre lo que es correcto y lo que no, lo que
está “socialmente aceptado” y lo que no, y como alguien que haya caído en eso —principalmente
por problemas mentales de tipo afectivo— quiera hacerse atrás, que sepa que va
a ser vetado y gente que decía ser “su gente” en lo que a amistades se refiere,
van a renegar de ellos y, si además su circulo está tan mal como ellos antes de
darse cuenta de este fenómeno, van a tener que escuchar frases muy duras y contenerse
o no a mandar a la mierda a esa gente.
Personalmente
siento lástima por todas las victimas de este fenómeno, pero aun más por los adultos
que siguen siendo victimas de esto a una edad donde ya deberían ser capaces de
darse cuenta de las manipulaciones de lo que en periodismo llamamos “espiral
del silencio”.
La espiral del
silencio es la herramienta comunicativa que promueve y avala este fenómeno. Yo uso
las redes sociales para decirte a ti, persona joven que estas formando tu
personalidad, lo que debes pensar, ser, decir, etc. sin dejarte reflexionar por
ti mismo.
Las redes sociales
deberían estar prohibidas para personas que sufren problemas afectivos y de
salud mental relacionados con falta de cariño, aceptación, etc. y si te sientes
solo/a, que no le importas a nadie y tus únicos seres queridos están en
internet y te dicen cosas feas cuando empiezas a cuestionar las creencias y a
dudar de todo y todos y se cabrean cuando encuentras tu voz, entonces déjame decirte
que esa gente no es tu amiga sino una secta de manipuladores que solo les
interesa controlarte para llegar y/o permanecer en el poder y que consumas todo
aquello que se considera “bueno” dentro de la secta.
Si no tienes círculos/personas
que hayas conocido fuera de internet y te sientes incomprendido/a si no es por
la gente de redes que tiene un comportamiento abusivo hacia ti —en ningún momento
considero que las redes sean malas por si mismas, solo que los jóvenes necesitan
ser educados al respecto y conocer los comportamientos que las diferentes
sectas que usan las redes sociales tienen—, te recomendaría terapia psicológica
con un especialista en traumas afectivos, si es que esa especialidad psicológica
existe, que lo ignoro.
Igual que
organizaciones terroristas captan a jóvenes vulnerables en las redes, también
hay otras sectas que usan ese método.
Además, la
espiral del silencio abarca también lo que se debe opinar y decir ante los
sucesos dependiendo de a que grupo de gente pertenezcas. Parece que existe la
individualidad, pero por lo que sea, en redes sociales no aplica. En la
comunicación social de Twitter, Instagram o TikTok hay un lenguaje, una opinión
base general de cualquier tema, da igual el hecho, las fuentes, lo importante
es compartir lo que dice la mayoría, porque si lo dicen mis amigos de internet,
seguro que es la verdad. Dan igual leyes, sentencias, hechos… solo la opinión
de aquellos que dicen que son mis amigos, me quieren y les importo es lo que
voy a considerar valido a la hora de opinar, porque sino la soledad que tenia
antes de conocerles va a volver y la simple idea de que eso sea una opción y
posibilidad real me causa ataques de estrés y ansiedad.
1.
VE AL MÉDICO SI TE SIENTES
ASÍ, que tienes problemas de salud, hay un hueso roto en tu cabeza, el doctor
te va a curar.
2.
Haz un experimento: vete de
redes una semana, eso incluye no poder hablar con nadie que solo conozcas de
internet —es decir no incluye si os conocisteis en Instagram pero os habéis visto
y tomado cafés en persona—; si te da ansiedad, estrés y te sientes como antes
de hacerte perfiles virtuales en redes, eres un/a firme candidato/a a víctima
de este fenómeno.
Como persona
que ha sido victima de esto y ha logrado salir, te digo que se puede, de
verdad, no es fácil, pero, sin ser yo persona que haya tenido problemas con la droga
o el alcohol, si veo unos patrones de comportamiento psicológico similares a
los que ocurren cuando alguien intenta desintoxicarse de algo nocivo para él/ella.
¿Podemos decir
entonces que el ambiente de redes sociales es una droga social para personas
con problemas de carencia afectiva? Me encantaría hablar con profesionales de
la salud mental sobre esto.
Hasta la
semana que viene,
Marta
