Convivir con la epilepsia
¡Hola a todos!
He decidido hablar de esto ahora que sé 100% que es y que estoy algo asustada todavía para ver
si hablando de ello se va el miedo. Todo porque alguien me dijo una vez que el miedo es solo
una reacción humana a lo desconocido.
Según Google la epilepsia y los ataques epilépticos o crisis epilépticas son, respectivamente, una
enfermedad cerebral no transmisible que puede o no ser crónica dependiendo del grado,
persona, etc., que está provocado por el aumento de la actividad eléctrica de las neuronas en
alguna zona del cerebro y en los ataques se pueden sufrir convulsiones o movimientos
corporales incontrolados de forma repetitiva o leve.
En mi caso, según sé, mis convulsiones son leves y breves, el problema es que me desmayo, que
esto no he encontrado si es común o no, aunque imagino que sí. A veces tengo avisos de que
voy a tener un ataque, empiezo a ver lucecitas o se me pone la vista borrosa, a veces me mareo;
pero, sobre todo al principio, no tenía ningún aviso previo y llegue a hacerme sangre y chichones
por la caída al suelo en redondo y repentina.
Llevo medicándome desde julio –si no recuerdo mal- y los ataques me empezaron en mayo.
Desde que tomaba la medicación no me pasaba más que una vez al mes, pero desde la semana
pasada he tenido dos ataques, uno el viernes y el otro el martes, a diferentes horas y en
diferentes situaciones; el del martes fue más preocupante porque me dio en medio del
transporte público, concretamente del tranvía. Llamaron a la ambulancia y a mi padre, pero al
final nos fuimos a casa sin que me hicieran siquiera revisión porque así es mi familia.
De todos modos, por la tarde llamé a mi neuróloga y le expliqué todo lo que estaba pasando, le
hice todas las preguntas que no le hice cuando me dio el diagnostico, porque estaba aliviada
solo con saber que pasaba y que podía curarme con medicación; me aumentó la dosis y me hizo
recomendaciones.
Mi chico también se ha preocupado de informarse acerca de cosas que puede hacer para
ayudarme y lo cierto es que, cuanto más nos informamos, mejor podemos gestionar la vida con
esta enfermedad.
¿Por qué me pasa? Hay muchas teorías: mi cicatriz cerebral de nacimiento es la principal. ¿Qué
provoca los ataques? Pues no sabemos. Puede ser ansiedad, azúcar, estrés, temperaturas…o
que simplemente pasa aleatoriamente.
He creído oportuno hablar de ello desde mi experiencia por si conocéis otros casos y no sabéis
como ayudar, y, también, porque esto –temporal o no, me han dicho que con el tratamiento
podría ser cosa de entre dos a cinco años o ya crónico- también forma parte de mi vida actual,
de mi día a día y cómo lo vivo.
No sé qué va a pasar, pero lo cierto es que mientras sepa que pasa y pueda controlarlo hasta
donde la ciencia me permite, tendría que poder convivir con ello con la dosis y el tratamiento
correctos.
Hasta la semana que viene.
Marta